Este año, tras el parto de Evaluna, parece haberse dado a conocer en España la aparente nueva moda de comerse la placenta de tu propio hijo. Sin embargo, es una tendencia con largo recorrido.
Las primeras referencias a esta tendencia denominada placentofagia se remontan a la década de los sesenta, en Estados Unidos, asociadas a otras prácticas naturales que tendían a alejarse del establecido rigor científico.
No sería hasta 2006 cuando esta práctica generó un verdadero impacto en la sociedad mediante el anuncio de Tom Cruise de comerse la placenta de su hija.
Considerado el pionero entre los famosos, su decisión fue mirada con recelo en una primera instancia; pero poco a poco se fueron sumando más celebrites hasta convertirse en un acto casi habitual entre ellos.
Ventajas y desventajas
Casi sesenta años después de las primeras especulaciones, la placentofagia se encuentra aún sin claras investigaciones científicas que expongan los beneficios e inconvenientes de esta conducta.
Entre la comunidad sanitaria se alude a casos en los que los bebés de las embarazadas que consumieron este órgano tras su parto sufrieron de estretoptococos, bacteria que se encontraba en la placenta materna y que la madre le había pasado a su descendiente mediante la lactancia.
Si bien la falta de análisis y contrastes suponen un riesgo para establecer los métodos de conservación y preparación de este órgano; los simpatizantes de esta práctica defienden las múltiples ventajas que proporciona como evitar la depresión postparto, mejorar el estado de ánimo o reducir el sangrado.
Famosos
Jennifer López
La cantante consumió en el parto de sus mellizos su placenta en cápsulas, además de ponerla sobre su piel a modo de tratamiento facial.
Kim Kardashian
La artista se sumó a esta tendencia en el su segundo parto, al igual que Jennifer López optó por consumirlas en pastillas; según su experiencia le aportaron una gran vitalidad.
Hilary Duff
El caso de esta actriz y cantante fue algo más impactante.
En lugar de escoger la placenta en pastillas, decidió colocarla en pequeños cubitos de hielo y conservarla para preparar futuros batidos.
Recetas
Aunque los batidos de Hilary crearan asombro; ahora son un éxito entre las mujeres, las cuales optan por esta fórmula puesto que es más fácil de preparar y digerir.
Sin embargo, en estos últimos años se han desarrollado múltiples recetas para poder ingerir este órgano incorporándolo en comidas tradicionales.
Entre estas se puede encontrar por ejemplo el estofado, en el que se sustituye la carne de ternera por unos trozos de esta “masa”. Después, se mezcla con aceite de oliva, sal, pimienta, cebolla, ajos, patatas, salsa de tomate, guisantes y vino blanco.
La lasaña es otro plato en el que los simpatizantes con esta práctica incorporan la placenta, puesto que la elaboración sigue siendo la misma y únicamente necesitan cambiar o añadir un ingrediente al relleno.
About The Author
