Desde que comenzó la crisis causada por la pandemia, no han sido pocos los pensadores que se han pronunciado vaticinando grandes cambios de configuración social, nuevos modelos económicos… y, sin embargo, hoy día nada parece quedar más alejado de la realidad.¿Qué dice esto sobre nuestra naturaleza?¿cuál es el papel de la filosofía en estos días?
El «trap feminista» no existe; pero tampoco pasa nada
Hay temas manidos sobre los que de vez en cuando se escribe y que te llevan a pensar: – ¿en serio? ¿no se han explotado lo suficiente ya? -.
Trap y feminismo son dos de ellos. Aquí una taza más.
No metas turra sobre memes
No es en absoluto descabellado hablar de “el meme” como el producto cultural más representativo de nuestra era; los consumimos, compartimos o incluso fabricamos casi a diario.
Su importancia como vehículo de expresión social lo hace y hará merecedor de numerosos estudios; pero hoy este artículo pone el acento sobre ciertas tendencias actuales que, a título personal, encuentro fascinantes, como la pérdida de la preponderancia de la palabra o la ironización de la propia estructura. Y bueno, mete turra sobre memes.
El valor de lo simbólico
Desde que se originó la crisis del CodVid19, se han creado nuevos símbolos: de unión, apoyo, resistencia… y, junto a ellos, ha nacido un discurso de mofa o rechazo.
Pero… ¿por qué este ataque a lo simbólico?
El ciberligue en tiempos de cuarentena
¿Por qué de pronto nos ha dado por buscar el amor- o algún subproducto de este- como locos?
Gramolas, Spotify y otros asuntos de intimidad
Hoy, que no hay nada sobre lo que hablar, un análisis «de lo particular a lo general» que pasa por Spotify, los ridículos, la música como lenguaje de las emociones y la privacidad en tiempos de la sobreexposición.
¿Delito de apología del franquismo?
Hace unos días conocimos que el nuevo gobierno tenía intención de incluir el enaltecimiento al franquismo dentro del Código Penal. Esto, que a primera vista debería haber sido una medida vista con buenos ojos por una amplia mayoría, ha suscitado más rechazo que aprobación.
¿Qué pasa realmente con los delitos de opinión?