Tres de los cuatro representantes de LaLiga Santander han sido eliminados de la máxima competición europea con una jornada restante

La Champions League ha dictado sentencia . Algo está pasando con el nivel futbolístico en España en los últimos años. Y la tendencia parece ir de mal en peor. En esta última temporada, 3 de los 4 equipos nacionales han quedado eliminados de la máxima competición europea. Con una jornada por disputar, Sevilla FC y FC Barcelona ya no tienen posibilidades de pasar a los octavos de final, y jugarán la Europa League en la segunda parte de la temporada. El Atlético de Madrid tampoco tiene opción para seguir en Champions, pero ni siquiera tiene asegurada la tercera posición y se lo jugará todo contra el Porto.

Cada caso es un mundo, pero está claro que el único equipo que ha hecho los deberes es el Real Madrid. El club blanco se ha clasificado sin sufrir y con posibilidades de hacer rotaciones para no cargar de minutos a los jugadores. Todavía queda por decidir si acaban en primera o segunda posición, pero están cuajando una temporada prácticamente perfecta, liderando también la clasificación de LaLiga. Los de Ancelotti se postulan nuevamente como candidatos al título sin la necesidad de descuidar el resto de competiciones.

 

FC Barcelona

Lo del FC Barcelona este año no tiene nombre. Después de invertir más de 100 millones de euros en un proyecto muy potente, quedan eliminados a las primeras de cambio. Es cierto que tenían el grupo más complicado, pero no es excusa para una de las plantillas más competitivas del mundo. Los más veteranos no han estado a la altura del reto, y los jóvenes han dado la cara pero no ha sido suficiente. El Barça no ha sido mejor que Bayern Múnich ni Inter de Milán. Además, todos los detalles inclinaban la balanza en contra de los de Xavi, que no fue capaz de reaccionar ante ninguno de sus dos rivales. Los posibles penaltis, fallos inexplicables, goles surrealistas… Todo le salió mal al conjunto blaugrana, que deberá dar la cara hasta el final en liga y ganar algún título para salvar los muebles de una temporada, que podría haber sido de transición, pero que Laporta decidió ir con todo desde el principio. Las palancas han condenado a una plantilla a la que se le ha exigido más de la cuenta (más aun teniendo en cuenta los fantasmas que persiguen a muchos jugadores después de tantos fracasos seguidos). 

 

Atlético de Madrid

En la capital, y como dijo Miguel Quintana, el Atlético de Madrid ha vuelto a ser ‘el pupas’. Al igual que el Barça, todos los detalles caen en contra de los colchoneros. Sin ir más lejos, el penalti en el último minuto del último partido frente al Leverkusen. El fallo de Carrasco, el larguero de Saúl y nuevamente Carrasco sacando el balón de Reinildo, que iba dentro. En ningún momento el Atleti ha mostrado un nivel suficiente para pasar de fase de grupos. Equipos como el Brujas y el Porto le han pasado por encima. El Cholo está siendo incapaz de sacar lo mejor de esta plantilla, y destellos de Reinildo abajo y Griezmann arriba están manteniendo la competitividad del equipo. Muchas otras veces hemos hablado de un posible ‘fin de ciclo’ de Simeone, pero siempre ha sido capaz de revertir la situación. Sin embargo, si la temporada sigue con esta tendencia y el Atleti no consigue los objetivos, quizás es momento de tomar una decisión.

 

Sevilla FC

Finalmente, el Sevilla FC ha acusado el pésimo inicio de temporada en Champions. Un grupo muy difícil (compitiendo frente al Dortmund y al Manchester City) y un vestuario dividido (con un nivel mucho menor después del mercado de fichajes) han acabado con las aspiraciones del club en la máxima categoría europea. Sin embargo, clasificarse a la Europa League no parece un fracaso tan grande. Al fin y al cabo, es la competición que les ha hecho grandes. Sampaoli está consiguiendo encajar las piezas y sacar resultados pese a que el juego no sea el más vistoso ni el mejor a largo plazo. Pan para hoy, hambre para mañana, pero después del inicio con Lopetegui, esto era lo que necesitaba el club de forma urgente. Muy cerca del descenso en liga, con salvar los muebles esta campaña el sevillista se debería dar por satisfecho. Quién sabe, quizás el club logre sacar el gen competitivo en su competición favorita y den una alegría a todos sus aficionados.

 

¿Fracaso de los equipos españoles?

 

A partir de ahora, todo parece encaminado a llegar al final de la temporada con ‘el mal menor’. No obstante, esto supone un fracaso con mayúsculas para el fútbol español. ¿Es un mal año puntual? Presuntamente no. Los españoles llevan años sufriendo para hacer un buen papel en Champions League (con una excepción clara). Además, el nivel de los equipos de zona media y baja de la clasificación en LaLiga está bajando por momentos. Los dos últimos años suponía un reto ver ciertos partidos de la competición nacional. El escaso ritmo de juego, las interrupciones, pérdidas de tiempo y la falta de jugadores diferenciales son los principales responsables deportivos de esta nueva crisis. Es cierto que este año LaLiga está ganando en espectáculo y emoción, con varios equipos de la zona media-alta de la tabla jugando muy bien al fútbol. Sin embargo, coincide con el peor año en décadas de los cuatro representantes en Champions.

 

Comparación con la Premier League

Comparando la situación con la Premier League, denominada la mejor liga del mundo, la tendencia parece totalmente la contraria. Podemos fijarnos en el ejemplo del Aston Villa para reflejar la situación. Un equipo ambicioso, con unos propietarios dispuestos a inyectar una gran cantidad de dinero, pero que hace una temporada bastante discreta. En verano, consigue quitarle un fichaje al Atlético de Madrid y se hace con los servicios del defensa titular del Sevilla FC (3º y 4º clasificados respectivamente). La temporada, aun así, empieza muy mal, y el equipo se encuentra al borde del descenso. El club decide destituir a Gerrard y consigue convencer a Emery (entrenador del Villarreal con el que ha ganado el primer título importante del equipo (Europa League) y ha llevado a semifinales de Champions) para ser su nuevo entrenador a mitad de año. Parece un sin sentido, y completamente imposible si estas operaciones fueran al revés.

El reparto de los derechos de televisión más equitativo desde hace más de 20 años, el permiso a la inyección moderada de dinero por parte de los dueños, la flexibilidad en el fair play financiero y un desarrollo desde las categorías inferiores hasta el fútbol profesional copiando la estructura que hay en España han ayudado a hacer crecer a la Premier League, creando su propia Superliga. A día de hoy parece improbable que cualquier liga del mundo pueda competir con la inglesa de forma individual, pues parece tarde para reaccionar.

 

Conclusión

No todo es malo, evidentemente, pero ahora se ve todo negro y de forma pesimista. Al final nuestra labor es criticar lo que se hace mal (al igual que alabar los aciertos) para ver si surge algún tipo de reacción. En España, normalmente, somos muy reacios a alabar el producto nacional, y lo comparamos con el internacional, desprestigiando lo nuestro. El nivel medio-bajo de LaLiga es realmente bajo comparado con los grandes equipos del país, pero quizás no hay tanta diferencia con los equipos en su misma situación en las cinco grandes ligas. Probablemente Isi Palazón no está tan lejos de Gordon, o Joselu y Aspas de Mitrovic y Vardy. Debemos valorar más nuestro producto y ser los principales promotores del cambio, empezando a consumir LaLiga de manera regular.

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