“Detrás de las ventanas, hay lesbianas” grita este histórico lema en la lucha por la liberación LGTB en España. Tenía mucha razón, las lesbianas seguimos muy escondidas ante los ojos de la sociedad. Por eso he decidido dar un paso al frente, por cada una de nosotras, para remarcar que enamorarse de otra mujer es precioso. Y muy natural.
La verdad es que no lo tenemos nada fácil en muchos ámbitos; el laboral no es una excepción. Nos enfrentamos ante dos techos de cristal; uno en relación de sexo y otro, por orientación sexual. Muchas reconocen portar un gran hermetismo con respecto a su vida privada en el trabajo. Algo en contraposición con los hombres homosexuales, llegando a costar encontrar lesbianas para contar su experiencia de la empresa en diversidad.
El desarrollo de nuestras relaciones, para algunas personas, está híper sexualizada. Sí, es posible que la pornografía tenga mucho que ver. Sin embargo, películas convencionales con relaciones lésbicas se quedarían en cortometrajes si se retirasen las escenas de sexo explícito. Otras personas guardan cuestiones sobre la ausencia fálica y su posibilidad de incorporación. Todas estas situaciones proyectan la curiosidad y desconocimiento a partes iguales sobre el lesbianismo. Todo ello sin contar con las personas que observan “como una obra de arte” la escena de dos mujeres besándose.
Ah, por supuesto, todas odiamos a los hombres, queremos ser hombres y somos súper masculinas. Además, buscamos convertir a cualquier mujer que conocemos.
Las que han tenido hijos, cuentan la odisea que resulta inscribir a sus hijos en el Registro Civil. Algunas han llegado a declarar que sería más sencillo que figurará como padre cualquier hombre presente que su esposa. El ámbito sanitario tampoco arroja más luz, especialmente la obstetricia, donde faltan protocolos.
Ante este panorama gris puede cundir la desesperanza. Sin embargo, yo golpeo la mesa con unos pocos ejemplos. La ventana se va abriendo, tranquila. Cada vez, hay más series donde aparecen lesbianas. Como todo ser humano, hay personajes lésbicos muy distintos. Ha llegado la fiebre hasta «Amar es para siempre» con el fenómeno «Luimelia». También tienes Netflix con «One day at a time» o Sense 8, ambas muy completas en representación. Incluso webseries en Youtube como «Notas aparte» o «Café sin leche». Todas tenemos derecho a un crush inalcanzable, encuentra al tuyo.
Si quieres estar al día de todo, tengo tres recomendaciones para ti: Hay una lesbiana en mi sopa, Mirales y Magles. Tienes novedades sobre series, películas, artistas, cantantes junto con artículos de opinión. Estos últimos os los recomiendo porque os sentiréis identificadas enseguida. Incluso organizan eventos en algunas ciudades importantes de España.
Sobre la visibilidad profesional, el pasado 16 de marzo se discutió mucho el papel de la mujer lesbiana y bisexual durante la celebración de LB Talks. Se celebró en Barcelona, enfocó la temática de la empresa, la tecnología y la cooperación como herramientas para un mejor bienestar de la mujer lesbiana. A esto le acompañaron pausas para coworking, que seguro, no tuvieron desperdicio. Es imposible olvidar el gran impacto que tuvo el año pasado el vídeo de Lesworking publicado por la versión web del periódico «El País». Muy recomendable su visionado si se quiere aprender sobre la mujer lesbiana en diversos ámbitos de trabajo.
Os dejo la ventana entre abierta, para que podáis animaros a mirar el mundo. Nos animo a seguir luchando cada día por derribar las barreras. Para que no nos quedemos detrás de las ventanas, tenemos que hacernos paso. Es hora de romper el secretismo, tenemos que mostrarnos como lo que somos. Pisemos la calle que vemos desde casa.
Magles Magazine: https://www.maglesrevista.es/
HULEMS: https://hayunalesbianaenmisopa.com/
MíraLES: http://www.mirales.es/
Artículo sobre webserie «Café sin leche»: http://www.itgetsbetter.es/cafe-sin-leche-una-produccion-lgtb-aragonesa/
Vídeo 26 mujeres dan la cara: https://www.youtube.com/watch?v=-60RoNoeglI
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