El pasado 10 de enero se estrenó la segunda temporada de la conocida serie mundial Euphoria, protagonizada por Zendaya en su papel de Rue. La versión estadounidense de la original israelí. Con posibilidad de ser vista en la plataforma de streaming HBO, se ha escogido continuar con el modelo de un capítulo semanal. España se puede ver a partir de las 4:00 am de todos los lunes.
Euphoria nos cuenta la historia de Rue, una adolescente con problemas de adicción que va narrando los hechos de su vida. Y no sólo eso, sino también de sus amigos más cercanos. En la primera temporada, cada capítulo comenzaba con una introducción narrada por la actriz protagonista de cada personaje cuyo papel es importante.
En un rápido repaso de personajes y actores antes de entrar en materia, tenemos a la segunda protagonista; Jules, encarnada por Hunter Schafer. Una chica trans que recientemente se ha mudado a la ciudad y que pronto se hace amiga de Rue. Alexa Damie como Maddy. Jacob Elordi como Nate. Barbie Ferreira como Kat. Sydney Sweeney, Cassie. Maude Apatow, Lexie. Algee Smith, Chris McKay. Y Angus Cloud como “Fezco”. Entre otros.
Las cuestiones que aborda la trama van desde las drogas, el alcohol, sexo, toxicidad de relaciones, inseguridad, depresión, movimiento LGTB etc hasta la amistad y el amor. Cuando uno ve por primera vez esta serie lo que más choca es lo explícito de la misma. No solo por los desnudos, sino por el modo en el que se tratan los temas mencionados.
En un contexto de realidad resulta imposible imaginarnos que todo lo que ocurre puede ser aplicado al día a día. Y aunque en cierto modo resulta hasta peligroso para menores entrando en la etapa adolescente ver esta serie, lo que se aborda en la misma no tiene que ser precisamente en un contexto de edades comprendidas entre 15-17 años. Hay que mirar más allá y analizar la crítica a nuestra sociedad.
Qué representa cada personaje
El hecho de que sean adolescentes es una forma de contextualización. Dar una imagen representativa, un icono.
En primer lugar, tenemos la cuestión de las drogas, en ocasiones vista como algo divertido. Común en fiestas. Que ayudan a evadirse. Rue es la representación de las drogas, de una persona con adicción. Y aunque vemos como en ocasiones disfruta y se “romantiza”, esto choca con el sufrimiento de una familia o de ella misma. La realidad que sufren muchas personas que conocen a una persona adicta. De la mano va la depresión, como ocurre con este personaje. Donde incluso el mero hecho de levantarse de la cama puede ser un gran esfuerzo mental.
Abordando a Jules (Hunter Schafer), hablamos de un personaje transexual. La propia actriz lo es también. Lo que vemos aquí es la sexualización del colectivo, desde el punto de vista de Cal Jacobs, padre de Nate. Pero otra cuestión que le afecta es la coacción a través de los desnudos.
Vivimos en una sociedad hiperconectada, donde al menos un 40% de parejas heterosexuales y un 60% homosexuales se conocen por internet, según un estudio sociológico de la Universidad de Stanford. No es raro que en algún punto pueda haber un intercambio de imágenes denominadas “nudes” o desnudos. Se ha advertido de los peligros que esto conlleva. Y, aunque la víctima de la posible filtración de imágenes privadas no es culpable, suele usarse como amenaza.
En el caso de Euphoria, el que amenaza con la filtración es Nate Jacobs (Jacob Elordi). Este personaje aborda el tema de la ira, la denominada masculinidad tóxica, el machismo entre otros. Habiendo sufrido abusos físicos por parte de su padre y la presión de ser un “hombre”, Nate muestra un desprecio por las mujeres de forma no directa. Ocurre con su novia, Maddy (Alexi Damie). En esta relación se ven patrones de maltrato donde la chica no es capaz de darse cuenta de ello.
Según el Barómetro Jóvenes y Género de 2021, de la Fundación de Ayuda contra la Drogadicción; 3 de cada 10 chicos de entre 15 a 29 años normalizan los celos como una prueba de amor. Y 1 de cada 5 cree que la violencia de género no existe.
Continuando con el tema de las relaciones tenemos a Cassie (Sydney Sweeney). En este caso vemos una dependencia emocional y validación constante de los hombres. Esto debido a la marcha de su padre cuando era más pequeña. Cassie es una chica enamoradiza e inocente de la que los chicos al final se aprovechan para únicamente mantener relaciones sexuales con ella. Grabándola durante el acto, aunque no lo quisiera. Tiene al final la fama de “fácil”.
Hay un detalle en este personaje que es el cuerpo, siendo sexualizada desde sus años de preadolescencia cuando desarrolló el pecho. Como si el único rasgo por el que importa o destaca fuera por ello, sin ser tomada en serio su opinión.
Por último, Kat (Barbie Ferreira). Es un personaje inseguro con su aspecto físico, ocultándose la mayoría del tiempo. En un determinado punto decide “empoderarse” y vestir de forma más provocativa, además de dedicarse a mostrar su cuerpo y cumplir fetiches de hombres en internet. Euphoria ha sabido muy bien como desarrollar este personaje.
Esto, como he mencionado antes, puede dar la falsa imagen de empoderamiento femenino. Recordando a páginas del estilo Only Fans. En los últimos años ha calado la idea de que mostrarse es sinónimo de feminismo cuando al final se está beneficiando el público típicamente masculino heterosexual. Hacen pensar que eres dueña de tu decisión de mostrarse, de ganar dinero, pero al final te conviertes en un objeto de consumo camuflado como feminismo.
También la sexualización cada vez más temprana de adolescentes y preadolescentes debido a las redes sociales.
Un problema de todos
Podemos comprobar que los problemas que afectan al conjunto de la sociedad moderna, principalmente joven, se concentran en unos pocos personajes.
El fin de esta no debería interpretarse como un conjunto de fiestas, sexo, alcohol y drogas que parecemos habernos perdido en nuestra adolescencia. Si no como una crítica personificada de esos temas que nos afectan y podemos vivir o ver en redes sociales.
Euphoria es un reflejo de la parte más oscura y triste de la sociedad.
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