Muchos de nosotros somos, en algún sentido, privilegiados. Aunque puede que haya algunos aspectos de nuestra vida en los que vivimos una opresión, también otros en los que oprimimos a los demás. Por supuesto, esto no es voluntario en muchas de las ocasiones, sino uno de los efectos de lo que llevamos automatizando desde pequeños. Vivimos en un sistema que beneficia a unos pocos y que nos hace interiorizar comportamientos que son dañinos, pero de los que ni siquiera somos conscientes. Por eso debemos deconstruirnos.

Sin embargo, es una tarea difícil teniendo en cuenta que no siempre conocemos a personas que sufran esa opresión (y aunque lo hiciéramos, no es su responsabilidad educarnos) o dónde buscar la información, ya que Internet es un mundo enorme y no siempre se puede confiar en la fuente que divulga la información.

Aquí van algunos consejos acerca de cómo deconstruirse:

1) Sigue activistas en redes sociales. ¿Quién va a saber más de su opresión que la persona que la vive? Muchos activistas cuentan su experiencia en RRSS y también señalan comportamientos problemáticos de otras personas, lo que puede servir para rompernos ciertos cristales y plantearnos cosas que antes no.

2) ¡No exijas información ni preguntes cosas personales! Respeta los límites. Que alguien sea activista, o parte de un grupo oprimido, no hace que sea persona tenga repentinamente el deber de educarte o de contarte sus experiencias personales. Da igual que esa persona haga hilos explicativos en Twitter, esté todo el día escribiendo artículos o sea tu mejor amiga; esas cosas las hace de forma libre y voluntaria (además de, normalmente, gratis), y tú no tienes ningún derecho a exigirle más de lo que ya está ofreciendo.

3) Lee libros acerca del tema. No todo el peso debe caer en los activistas, aunque estos sean de gran ayuda a la hora de deconstruirse. En muchas ocasiones, ellos mismos tienen recomendaciones de libros que hablan de los temas de los que informan.

4) Sé agradecido: el activismo es algo que conlleva mucho tiempo y que se suele hacer en tiempo libre, por lo que muestra tu agradecimiento a las personas que se dedican a ello, ya sea dándoles las gracias o apoyándoles económicamente si tienen alguna plataforma.

5) Contrasta información. Un lado más complejo del activismo es que suele tener muchas ramas, ya que hay muchos puntos de vistas y opiniones de personas que viven la misma opresión. En este sentido, hay que ser un poco crítico y comparar lo que se lee para poder tener una visión más amplia.

Esos son algunos de los consejos que creo que pueden ayudar a deconstruirse, aunque el primero de todos siempre es la voluntad de hacerlo y crecer como persona.

About The Author

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada.