Con un lenguaje demasiado insípido y vacío, Dicker presenta a los protagonistas de esta historia coral como un pestañeo, como un breve trago de fugaz sabor que no posa, sino que transita
Literatura
Ayer, día 23 de abril, celebramos el Día Internacional del Libro, una cita señalada a fuego en el calendario de todos los amantes de la lectura, de todos aquellos que todavía se deciden por un libro en lugar de por un ramo de flores para obsequiar a sus amores, porque ya lo decía Rubén Darío, que los libros son fuerza, alimento, antorcha del pensamiento y manantiales de amor.
Tonya Harding, Noam Chomsky y Robe. Los tres tienes algo en común: son personas políticamente incorrectas. Las personas políticamente incorrectas atraen. Son personas que tienen el don de ejercer un extraño magnetismo sobre nosotros, sobre nuestros pensamientos. Pero, ¿qué significa ser políticamente correcto o incorrecto?
«Solo al final del libro, el título de Cicatrices (in)visibles y su paréntesis movible adquieren todo su sentido. En un primer momento, la elección de la palabra «cicatriz» resulta incómoda. Confronta directamente y rechaza la cultura de la positividad impuesta que enseña a disimular, a esconder y, en el fondo, a avergonzarse del propio cuerpo o de la experiencia cuando no se ajustan a unas expectativas culturales que a menudo son totalmente arbitrarias». T. Forcades I Vila