Durante este sábado, las Islas Canarias se llenaron de manifestantes que han protestado en contra del turismo masivo en el archipiélago
Si empezamos por el principio de este problema nos tenemos que remontar a la época en la que España se abrió al turismo. Este turismo en masa que llegó entre los años sesenta y ochenta supuso un autentico misil que impulsó el crecimiento económico del país, antes de su llegada, España, era un país pobre donde la mitad de la población vivía de la agricultura y con altos niveles de analfabetismo.
La llegada de todos estos turistas y ojos del extranjero, sobretodo a la zona de Benidorm, Costa Brava o las Islas Baleares, hizo que desde la gobernación del país se comenzara a invertir de manera, casi, masiva en construcciones como carreteras, hoteles, aeropuertos, bares, restaurantes… Todo esto hizo que gran parte de la población que trabajaba en la agricultura dejara ese puesto de trabajo para ir a trabajar a estos nuevos empleos.
¿El problema del turismo en la actualidad es que no puede ser el motor de una sociedad?
Algo simple que todos conocemos es que cuando un país ha llegado al culmen de la riqueza en un sector solo puede hacer una cosa, innovar, y, ¿cuál es el problema del turismo? No es otro que dentro de este sector no se puede innovar más, no puedes cambiar una playa, o el mar de manera que más gente quiera ir a ese lugar. Esto, por ejemplo, no pasa con otros sectores como la agricultura, ganadería o tecnologías.
Por otro lado también podemos ver que cuando hay un sector puntero en un país, nos encontramos con que se corrompe. En España, Italia, Grecia… hemos conocido casos de corrupción urbanística para poder sacar provecho de zonas que no se pueden modificar.
¿Las Islas Canarias podrán hacer algo contra esto?
La realidad es que las Islas Canarias cuentan con el 35% del PIB de la Comunidad Autónoma basada en el turismo y de igual manera el 40% del trabajo es de este sector. Los canarios que han salido a las calles tenían tres reclamaciones principales, imponer un moratorio, una ecotasa y regular la compra de vivienda de los extranjeros.
Las marchas de este 20 de abril recogen una expresión de hartazgo por los altos índices de pobreza, los bajos salarios, la escalada de los precios de los alquileres o la saturación de las carreteras y de los espacios naturales, que ha cristalizado en una cita que ha evocado a las grandes movilizaciones históricas vividas en Canarias.
¿Qué es cada cosa?
- Moratorio: Durante situaciones de crisis como pandemias, desastres naturales o conflictos políticos, los gobiernos pueden implementar moratorios en el pago de impuestos turísticos, tasas de entrada a sitios turísticos, o incluso en el cumplimiento de ciertas regulaciones específicas para la industria del turismo.
- Ecotasa: Es un tipo de impuesto o tasa que se cobra a los visitantes que se alojan en ciertas áreas turísticas con el fin de financiar proyectos relacionados con la conservación del medio ambiente, la preservación de la biodiversidad y el desarrollo sostenible de la región.
- Regulación de la compra de vivienda de los extranjeros: Puede abordarse mediante diversas medidas legales y administrativas, con restricciones de acceso que se podrían establecer ciertas restricciones o condiciones para que los extranjeros puedan adquirir propiedades en determinadas áreas geográficas o tipos de propiedades, limitaciones cuantitativas, que se podría establecer un límite en la cantidad de propiedades que un extranjero puede adquirir en un período de tiempo determinado e impuestos adicionales donde se podrían aplicar impuestos adicionales a las compras de vivienda realizadas por extranjeros, con el fin de desincentivar la especulación inmobiliaria y generar ingresos adicionales que puedan destinarse a políticas de vivienda asequible o programas de desarrollo urbano sostenible.
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