Sin quererlo ni comerlo, nos hemos adentrado en las profundidades del otoño antes de lo que esperábamos.
Los planes de verano, han sido vetados por los días lluviosos y el viento in crescendo que, hacen que resulte más apetecible ver la tele en casa que intentar salir del sofá.
No obstante, sin darnos cuenta tampoco, las ciudades han vuelto a rebosar gente y a recuperar ese ambiente juvenil y, es que, ya estamos lejos de las calles desérticas que la huida característica del verano desencadenaba en las grandes ciudades como Madrid.
Ahora, hay vida y movimiento, solamente hace falta saber aprovecharlo e incorporarse a su ritmo.
Muchos nos preguntamos qué hacer y cómo adaptarnos al cambio de rutina y de estación. Pero no debemos preocuparnos, porque en Madrid existen una infinidad de planes. Simplemente hay que analizarlos y escoger el que más se adecue a nuestras apetencias de cada semana.
Madrid brilla, entre otras cosas, por el gran abanico de ocio que posee, la amplia variedad gastronómica que ofrece y por muchos otros aspectos que le permiten estar en el top más alto de las mejores ciudades del mundo.
Me dispongo a enumerar las actividades que más me gusta hacer en esta época que, aunque se puedan realizar en cualquier momento del año, el otoño las hace más ideales y bonitas:
Musicales, monólogos, teatros, cines y museos
Uno de los grandes pros de Madrid es la gran oferta de obras que tiene.
En la actualidad, está en boca de todos el estreno de Anastasia traído del mismísimo Broadway, el éxito de Billy Elliot, la inagotable fama de El rey León, o lo moderno de La llamada, con la incorporación de estrellas de OT. Así que si os gustan los musicales en directo, tenéis la ocasión de vivir en primera persona cualquiera de ellos.
Si os apetece más reír, siempre puede estar bien ir a ver un espectáculo en El club de la comedia o en La chocita del loro.
Y si ninguno de los dos planes os llaman, siempre os quedará el teatro o el cine, ya que ambos cuentan con una amplia oferta de obras para todos los gustos en esta época. Es cierto que, hace poco, comentábamos la escasa variedad de estreno en el cine, pero en otoño se suelen acumular porque saben que vamos a estar más dispuestos a hacer este tipo de planes, que en otras épocas con climas mejores. En concreto, la última semana podíamos ver estrenos como el de La sombra de la ley, A star is born, Un pequeño favor o Venom, entre otras.
Gym power
Cuando pensamos en verano, nos viene a la mente rápidamente, gente al aire libre y una clara nula apetencia de ir al gimnasio a definir nuestra figura.
No obstante, en otoño, con el comienzo del curso, empezamos a definir objetivos y nos proponemos unos cambios que cumplir. Además, con el tiempo torcido, comienza a apetecer mucho más, pasar horas y horas en un espacio cerrado.
De este modo, otoño es la época en la que suele haber vuelta a la rutina en términos deportivos. El fresco que ha llegado, hace que apetezca más volver al gym que en el caluroso verano.
Comidas, brunchs y copas
Una buena opción para los días de otoño es disfrutar de su oferta gastronómica en un buen sitio, y relajarnos con unas copitas de buen vino.
Es otoño ideal, porque en verano nos quedamos en la terraza y no disfrutamos tanto de sus decoraciones interiores, y en invierno los jerseys nos impiden acabar de estar cómodos dentro.
Os recomiendo que visitéis los siguientes restaurantes:
- Cocina tradicional contemporánea: son restaurantes que sirviéndose de recetas tradicionales, le dan una vuelta más vanguardista a la comida, siempre con productos de calidad. Destacamos los siguientes restaurantes: Ochenta grados, Lateral o, si buscáis algo más sibarita, Marieta.
- Romántica: Soy totalmente fan de todos los jardines de Salvador Bachiller. Son gastrobares muy originales, con una decoración totalmente floral. En concreto, os recomiendo mi favorito entre todos: El invernadero.
- Asiático: Tuk Tuk y Oishii Sushi & Ramen, son muy buenas opciones. Si sois de excesivo buen comer, directamente tenéis que ir a Sumo. También os tengo que recomendar Ramen Kagura, en Ópera; este sitio es el noodle bar japonés por excelencia: desde bebidas, platos, hasta incluso baberos para no mancharos.
- Vegetariano: destacando Superchulo, con una amplísima oferta de comida para vegetarianos con un plato estrella: la hamburguesa vegetariana; y Hakuna Matata, en Bellas Vistas, con un risotto espectacular y unos entrantes de rechupete.
- Casero de toda la vida: tortillas de patata en la Taberna del Buo en Chueca o Casa Dani por la Milla de Oro.
- Brunch: tan de moda desde hace un tiempo, en Madrid existen innumerables locales que tienen este tipo de oferta. En función de la idea que llevéis o el gasto que queráis podéis optar a unos u a otros. Yo en concreto, soy muy fan del Bar Tomate.
- Copas: además de la gran oferta que hemos comentado; después de una buena cena o comida, a veces apetecen unas copitas y, para ello, hay sitios ideales por visitar: Ojalá, es un local que me encanta y más fuera de verano. Este sitio, que cuenta con un espacio que simula una playa, a mi me resulta encantador ya que, en esta época, quedan muy lejos nuestras aspiraciones veraniegas y este lugar nos las recuerda. Además, en Madrid existen numerosas coctelerías, en constante evolución. Por recomendación de colegas os sugiero visitar el 1862 Dry Bar.
Maratón de series
Muchos pensaréis que en cualquier momento del año podemos hacernos un buen maratón de series, pero tengo que deciros que no estoy del todo de acuerdo. En primavera, nos gusta más estar en terracitas y empezar a disfrutar del buen tiempo que trae el fin del invierno. En verano, las piscinas se llevan el palmo, y en invierno, lo que más nos apetece es estar frente a la lumbre mirando a la nada o esquiando o patinando a lo Yo, Tonya.
Por tanto, la mejor época para darle duro a todas las series, es el otoño y para ello contamos con innumerables opciones a costes asequibles.
En concreto, podemos hablar de Netflix, que está de moda (y quien diga lo contrario, miente).
Para destacar se encuentran: La casa de papel (la vi en 48 horas), Élite (la gran serie de jóvenes de moda), Stranger things (con su adictivo trama y sus carismáticos protagonistas), La casa de las flores (brutal) , Suits (aunque sea por ver a Meghan Markle en su anterior vida), Narcos (¿plata o plomo?), The Crown (brutal BSO), Peaky Blinders y similares.
Para todos aquellos que no tengáis Netflix, HBO también cuenta con series top, destacaremos Juego de Tronos (¿cómo no?), Sharp Objects (de los mejores papeles de Amy Adams), El jardín de bronce (argentina con un trama muy adictivo) y Pose, una serie que me pareció brutal que se adentra en términos de transexualidad, VIH, y una moda de lo marginal de New York en los 80 que la convierte en una serie irrepetible.
Escape rooms
Están en las noticias y en la publicidad casi todos los días porque se han convertido en una de las actividades más divertidas y novedosas de los tiempos.
En concreto, quiero hacer referencia a uno que me muero de ganas por hacer y que, por el momento, solo se encuentra disponible en la gran capital: el escape room de La casa de papel. ¿No tenéis ganas?
¡Es un buen momento para hacerlo!
¿Bolera, billar o futbolín?
Y para esos días lluviosos, frescos, o en los que no se puede estar en la calle; que mejor plan que ir a la bolera o a algún pub que tenga billar o futbolín.
Son juegos que nunca pasan de moda, pero que igual en verano habíamos dejado más de lado.
Pero no os preocupéis, que estos no son los únicos planes que podéis hacer. El otoño, es la época clave para salir a pasear y comer castañas a la vez.
Puede resultar algo aburrido, pero es uno de los grandes placeres de la vida: pasear cuando hace fresquito, mientras comes unas calientes y recién hechas castañas debería ser considerado como la octava maravilla.
Por otra parte, el caluroso verano ha impedido en tierras madrileñas, como nos cuenta la experiencia de sus ciudadanos, ir a un camping con tanto calor. Pero, ahora mismo, la temperatura puede ser la ideal para salir al campo y hacer una tranquila acampada.
Ojo, porque se acerca Halloween y los más miedosos no se deberían adentrar en esta aventura, tan solos en la intemperie.
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