Según datos de El País, la soledad es una de las principales causas del aumento de animales domésticos, en nuestro país es del 40% en los últimos cinco años. Hasta el año pasado, concretamente, eran cerca de 13 millones. “En España hay más animales de compañía que niños menores de 15 años. La gente vive cada vez más y más sola», señala el veterinario Armando Solís, presidente de la Red Española de Identificación de Animales de Compañía.
El Monasterio de Piedra o los espacios naturales de la Sierra de Albarracín son algunos de los lugares que pueden visitar los perros en Aragón, pero no siempre se permite. La ley autonómica prohíbe la entrada de animales en establecimientos donde se sirve comida, pero la ordenanza de mascotas del Ayuntamiento de Zaragoza sí lo acepta. Esta confrontación entre ambas normativas hace que muchos bares y cafeterías opten por el ‘NO’ en la capital aragonesa.
La lucha y las aventuras de Pipper, el perro turista
Pablo Muñoz, dueño de Pipper, el perro viajero, considera que Aragón, como alguna que comunidad española más que se incluyen dentro de esas pocas excepciones, está haciendo una interpretación restrictiva de la normativa general. Lo cierto es que los perros no pueden estar en los lugares donde haya alimentos, como por ejemplo en supermercados. Sin embargo, en Italia ya han adaptado los carritos de la compra para que los caninos puedan acompañar a sus dueños, siempre que no entren en contacto con los alimentos.
Ambos han dado la vuelta a España y han visitado 50 ciudades. Lugares en los que han podido comprobar que ahora la tendencia es dejar que el dueño decida si pueden o no entrar las mascotas. Sin embargo, y aunque en la mayoría de comunidades autónomas existe esta libertad, hay excepciones, como Aragón. Pablo señala que «es una gran pena» porque Zaragoza es una ciudad cosmopolita, que ya tiene una ordenanza municipal que da libertad al empresario y que protege ese derecho de aquellos que tienen un animal de compañía pero, sin embargo, la normativa autonómica lo impide. Algo que genera inseguridad e incertidumbre en los ciudadanos.
Además, y para llegar a los más jóvenes, Pipper ya ha dado el salto al cómic acompañado de las mascotas de sus seguidores de redes sociales como Facebook e Instagram. Una historia que narra las aventuras de estos amigos caninos y que, como apunta su impulsor, Pablo, «va a servir para concienciar a los mas pequeños de que un perro educado puede estar en cualquier parte, que las mascotas son una responsabilidad, y que hay que cuidarlas.
En Zaragoza, Silvia Porras, con el proyecto «Tu perro es Bienvenido»
Silvia Porras es la impulsora del proyecto Tu perro es Bienvenido, una iniciativa que tiene el objetivo de crear una red de comercios Dog Friendly, “Amigos de los Animales” .
«Surgió porque yo tengo una empresa de cuidado de mascotas. Entonces, hablando con los dueños de los perros, veíamos que nos apetecía entrar en algún comercio, hacer alguna compra y siempre tenemos que estar preguntando antes de entrar en los comercios : Perdona, ¿Puedo entrar con el perro? » Para la sorpresa de la mayoría, todos coincidían en que casi siempre les decían que: «Sí, claro, tu perro es bienvenido».
Estos comercios ya tienen su insignia “Dog friendly” para que los dueños sepan de un vistazo si pueden entrar acompañados de sus perros o no. En Zaragoza, ya son 100 los establecimientos que colaboran con la iniciativa de Silvia.
Como la herbolisteria vegana Ohrigen de Javier,donde han dicho sí a que todo tipo de animal de compañía los visite. Porque saben lo que es de primera mano dejar a tu animal fuera y creen que es una buena idea. «Las personas que compartimos la vida con un animal sabemos dónde los podemos llevar y donde no los podemos llevar. Además y como señala el mismo, existen muchos peligros como (robos, maltratos, abandonos…) y «si entran a la tienda es un momento, tampoco pasa nada», añade. «Así se evita que los animales corran ese riesgo».
Tanto Pablo como Silvia, coinciden en que poco a poco, las instituciones se vayan concienciando de que «no pasa nada». Yo creo que estaríamos encantados si tuviéramos al menos 100 bares o 100 restaurantes donde pudiéramos ir con nuestro perro», apunta Silvia. Ambos coinciden, con un nuevo equipo de Gobierno, y con la legislatura que acaba de comenzar sería un buen momento «para pensar y rectificar«, como concluye Pablo.
Perros educados sí. Un perro educado puede estar en cualquier sitio, siempre es bienvenido
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